Internos del Cereso de Chetumal confeccionan hasta 350 hamacas a la semana

Joana Maldonado

Chetumal

La elaboración de hamacas representa la principal actividad económica y también pieza fundamental para la reincorporación social al interior del Centro de Reinserción Social (Cereso) de Chetumal. Al menos 20 por ciento de las Personas Privadas de su Libertad (PPL) se dedica a esta labor artesanal con el objetivo de generar ingresos para ellos y sus familias.

El director del Cereso de Chetumal, Hugo Silva Solórzano, relató al respecto que esta actividad es considerada como autoempleo y que puede beneficiar hasta unas 600 PPL, quienes le solicitan a sus familias les compren hilos para el tejido de hamacas, según el material que requieran por encargo y diseño. Semanalmente generan de 200 a 350 hamacas, aunque en temporada baja la cifra puede oscilar entre 100 y 150.

Silva Solórzano estimó que cada uno de los 200 artesanos que se dedican a la hechura de hamacas generan hasta dos e incluso tres cada semana, por lo que constantemente atienden solicitudes para el ingreso de hilos por parte de las familias. El material a utilizar también depende del tipo de hamaca que se elabore. Hay de 20, 25 o 30 franjas, lo que se traduce a los tamaños individual, matrimonial y king size.

Si el pedido es especial y requiere reducir tiempos se hacen en periodos menores, “pero eso es esforzándose al máximo e inclusive dejando de lado otras actividades de reinserción social”.

“Su principal fuente de ingresos es el trabajo, muchas veces le dedican más de ocho horas al día, porque inclusive en la noche, como es una hamaca, la pueden elaborar dentro de sus dormitorios, antes del cierre de las celdas”, apuntó el director.

Además, esta actividad genera empleo al interior del Cereso, dependiendo de los pedidos que haya, en donde cada PPL puede emplear hasta otras tres personas, por lo que se duplica el beneficio.

“Posiblemente eso les ayuda a crear otro tipo de autoempleo para otras personas y lo único que les pagan es la mano de obra, que es alrededor de 300 pesos”, precisó el funcionario. Básicamente, es la familia la que se encarga de la comercialización de las hamacas al exterior del Cereso, por lo que trabajan por pedido y bajo un esquema de catálogos.

En el Cereso de Chetumal la elaboración de hamacas es una actividad que tiene mucho arraigo, y es impulsada y enseñada por artesanos de mayor edad que se encuentran privados de su libertad.

“Hay muchos viejos artesanos privados de la libertad que fueron los pioneros o que en su momento algún otro privado de la libertad les enseñó y se quedó como costumbre, entonces ellos van dejando ese tipo de actividad en la que les van enseñando, capacitando y cuando se va el otro saben que se le va a quedar a él el negocio, si es buen hamaquero se le va a quedar”, citó el director.

Los artesanos utilizan aparatos rudimentarios hechos con varas o palos que ellos mismos elaboran. En cada hamaca la inversión de mano de obra y material alcanza hasta 500 pesos y se recupera hasta el doble en la comercialización. Los diseños de las hamacas son muy variados, e incluso algunos exclusivos.

La elaboración de artesanías es una actividad voluntaria entre las PPL, que pueden elegir entre otras actividades a realizar dentro de los ejes de reinserción social, como hacer deporte, trabajo, capacitación para el empleo y la salud. Adicionalmente, al interior del Cereso se desarrolla como una segunda actividad económica la carpintería.

“Hay una carpintería bastante amplia que nos ha puesto en la mira de varias instituciones, inclusive del sector público, al que les hacemos buzones, sillas, cuadros, marcos para diplomas, etc. La carpintería es la segunda fuente de ingresos. Muchos tallados de los que ves en las oficinas de gobiernos fueron hechos aquí en el Cereso”, comentó el funcionario.

Para el director del Cereso es importante fomentar ese tipo de actividad al exterior para generar autoempleo, sobre todo para aquellos de nuevo ingreso, porque se considera pieza fundamental para la reinserción social y para generar un ingreso con el que puedan ayudar a sus familiares del exterior y solventar gastos que puedan tener al interior.