Playa del Carmen
Los cubrebocas desechables están hechos de polipropileno, mismo material con el que se elabora el hilo para el urdido de hamacas, lo que ha generado el incremento del costo de este hilo, que en algunos casos es de casi el doble de lo que se manejaba antes.
“Estos últimos dos meses subió un 80% el precio del hijo, hubo una gran crisis. El polipropileno no es nylon propiamente pero es la materia prima tanto para los cubrebocas como para el hilo de las hamacas. Para hacer este hilo se toma el polipropileno y con un tratamiento de calor y una maquinaria se estila para que tome esta forma”, explica Ámbar Sotres, encargado de La Casa de las Hamacas, en Playa del Carmen.
Detalla que los precios pasaron, por ejemplo, de 44 a 64 pesos en un tipo de hilo y el más económico subió de 27 a 40 pesos, lo que considera “un buen golpe” para la economía de quienes elaboran estos artículos.
“No sólo para aquellos que elaboran hamacas, recordemos que con estos hilos también se hacen bolsas, gorras, accesorios como llaveros y el hilo de algodón ha tenido mucho éxito para hacer macramé, cortinas, tapetes, etc.”, menciona.
La Casa de las Hamacas, ubicada en la colonia Luis Donaldo Colosio, de Playa del Carmen, vende diferentes tipos de hamacas y los insumos para su realización. Estas provienen de los poblados Tixkokob y Nah Balam, en Yucatán, y de la cárcel de Valladolid, también en el vecino estado.
“El tejido tradicional es el agua, que es abierto y se usa comúnmente aquí por ser el más barato, luego está el tejido doble, que es de lujo, se llama petatillo o carioca y hay una gran variedad de diseños”, y añade:
“Hay hamacas de todo tipo: para decoración (que son chiquititas), de juguete, para niños, todas son hechas a mano, generalmente hay que tener el cuidado de no subirse con un pantalón que tenga botones o algo que vaya a jalar el hilo. Las hechas a máquina son las más recomendables para los niños”, acota.
En este lugar pueden encontrarse hamacas de algodón y nylon y tienen muy buena venta, incluso, pese a estar en una zona popular, llegan clientes extranjeros para llevarlas a su país: ”les gustan mucho, casi se venden solas”.
Los precios van de 390 a mil 60 pesos en el tejido tradicional y de las de tejido doble la individual la venden en mil 620 y la matrimonial en mil 990. Hay una categoría intermedia, que es la “hamaca arcoiris”, que también es un tejido doble y vale mil 380. Las doble y de lujo tienen todo el brazo tejido, no así las de tejido normal.
Chinchorro (hamaca), es el nombre coloquial dado a la hamaca en las zonas del Llano, en Colombia y Venezuela, en Panamá y en algunas zonas de España.